A principios del siglo XVII fue instalada en el predio que ocupa hoy la Plaza San Martín una ermita para la práctica de retiros espirituales a la que se le llamara “San Sebastián” y en razón de la cual el barrio lleva el nombre de "Retiro".
A principios del siglo XVII fue instalada en el predio que ocupa hoy la Plaza San Martín una ermita para la práctica de retiros espirituales a la que se le llamara “San Sebastián” y en razón de la cual el barrio lleva el nombre de "Retiro".
En 1801 se trasladó al Retiro la “Plaza de los Toros” que estaba hasta ese momento ubicada en el barrio de Monserrat, contando ésta con capacidad para 10.000 espectadores. En 1812, el entonces Coronel San Martín crea el Regimiento de Granaderos a Caballo que tiene como sede el lugar que dejara la demolida Plaza de Toros.
En el año 1862 fue inaugurado el monumento al General San Martín, obra del francés Louis Joseph Daumas. Así, la zona destinada a saladeros y curtiembres pasó provisionalmente (por traslado de las industrias) a ser zona de veraneo.
En 1863 se inaugura el Ferrocarril del Norte, que unía a la estación Central (L.N. Alem y B. Mitre) con el barrio de Belgrano, siendo esto antecedente de las estaciones de trenes en su generalidad. La catástrofe de un incendio de consideración destruyó por completo las instalaciones ferroviarias, lo que promovió una reestructuración edilicia en 1914, considerada una de las más importantes construcciones metálicas del mundo y de industria inglesa.
Hacia 1878, debido a la creciente inmigración, se construyó un hotel para Inmigrantes, que funcionó hasta 1911. Su capacidad era de 800 camas y era reducto obligado para el recién llegado.
Grandes organismos tomaron lugar en cercanías de la plaza: el Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto (la Cancillería, 1936) y el Palacio Paz, donde desde 1939 funciona la sede del Círculo Militar y su Biblioteca.
En su evolución natural, el Barrio de Retiro conservó parte importante de sus rasgos primigenios como lo fueron la conservación de monumentos, de lo edilicio que convive con el actual, y la fisonomía intrínseca de cada una de sus zonas.