El Barrio de Retiro es un generador de interés turístico por la versatilidad de sus propuestas y la animación que esto representa.
Una rápida mirada muestra simultáneamente el incesante fluir de trenes (3 líneas de ferrocarriles: Mitre, Belgrano y San Martín), micros de larga distancia, personas, bolsos y valijas, deambuladores que recorren su mercado de venta instalado hoy por hoy en una improvisada galería techada entre las terminales de los trenes, puestos de venta de comidas rápidas, restaurantes al paso, paradas de colectivos que surgen de a decenas, el abuso en número de taxis que llegan y se van.
Sumado a ello y aledaña a la Terminal de Ómnibus está asentada una de las más extendidas Villas Miserias de Buenos Aires, La Villa 31, que ya constituye de por sí un barrio dentro de los barrios con sus casillas de ladrillo o material como viviendas precarias
A la vera de las instalaciones consagradas a los viajeros, separada por la Av. Libertador, la suntuosidad de la edificación que circunda el esmeradamente cuidado espacio verde de la Plaza San Martín, los palacios que albergan el Círculo Militar, la Cancillería con edificación histórica del más definido estilo francés, imponentes edificios de departamentos, hoteles de categoría 5 estrellas, refulge su otro talante.
Un poco más allá, la Peatonal Florida ofrece un selecto centro de compras con mercaderías de idéntico tenor y salones de té con interés histórico como la confitería “Richmond”.
Un barrio para la plenitud de la vivencia de quienes lo visitan.