Ya en el siglo XIX, el entonces gobernador de Buenos Aires, Juan Manuel de Rosas, adquiere tierras donde están hoy las calles Av. del Libertador y la Av. Domingo F. Sarmiento e inicia la construcción de una casona de arquitectura de la época a la que adosa una capilla en honor a San Benito, casa que es dinamitada a fines de siglo (en excavaciones se descubrieron sus cimientos), ya sobrevenida la declinación de Rosas después de la pérdida de la Batalla de Caseros (1852), lo que provoca una provisoria decadencia de la zona.
En ocasión de la presidencia de Domingo Faustino Sarmiento los terrenos libres se van acotando ya que se conceden predios a la Sociedad Rural Argentina para exposiciones de ganadería, al Hipódromo Argentino y a la Asociación de Polo.
Con anterioridad (año 1874) se había dispuesto de terrenos destinados a la creación del Parque Tres de Febrero y a la del Jardín Zoológico y el Jardín Botánico.
En el siglo XX, el otorgamiento de tierras para la construcción de canchas de golf, de los clubes G.E.B.A., Amigos, Hípico y Lawn Tenis, así como los utilizados para el Planetario, el Velódromo, la Mezquita Islámica, el edificio de Aguas, etc., provocaron la reducción de más de la mitad de lo que fueran en un inicio los Bosques de Palermo.